sábado, 24 de noviembre de 2007


A un lugar que se llamó Valencia...
Cada uno de vosotros, pensamientos puros en mi mente, que me acercan a la primera célula madre, al centro de la fuente, a la primera chispa, al principio del todo, donde reconozco la alegría indescriptible que envuelve el recuerdo de no estar aquí, mas jugando nuestro ultimo juego feliz….Puedo sonreír en Paz, por que en ti el brillo de tu mirada las puertas veo llegar. Y allí todo se para y dejamos de ser tu y yo para convertirnos en la Felicidad, en el gesto. En el regalo de aceptar que somos un pensamiento perfecto, que esta siendo destilado para ser entregado a la ultima respiración de lo infinito. Tu palabra calma mi corazón y en ella escucho el sonido del descenso de las alas, los ángeles riendo están. Espíritu Santo a mi lado estás, usando cada pensamiento e imagen para invertir todo hacia el lugar de tu nacimiento.
Un único hilo de luz nos comunica con todo. A ti vine a buscar. Y mi mano sujeta al Padre, una oración viva no deja de amar.
Te amo y por la razón de lo que eres junto conmigo mi confianza es total, junto contigo nada puedo temer, no confusión, si no fusión.
Por amor nos vamos, por amor estuvimos un instante, nunca pudiendo dejar de saber de nuestra Paternidad, aquello que primero quisimos rechazar, sin antes saber que era. No tuvimos éxito en crear un sueño perfecto, porque jamás pudimos quedarnos completamente dormidos, es imposible que en medio del lago de lodo una azucena pudiera marchitar. Donde esta la Luz la oscuridad no da lugar. Permaneces seguro en sus brazos.
Donde no hay defensas, donde el corazón es transparente, donde no hay conflicto, cuando todo se une en ti, y todo es una entrega total, todo instante santo, todo deleite, todo devoción, todo servicio. Nada para mi, todo a ti. Solo un respirar y una única palabra…Padre. Tu último abrazo final ya cerca parece comenzar.
Te amo ahora, solo ahora es donde puedo sentirte y encontrar…Padre a ti vamos…Tu Santo Hijo…Tu voluntad, aquí en la Tierra como en Cielo!!!
Gracias hermanos, por la sanación, reconocimiento, alegria, por vuestro amor incondicional , por ser la nota imprescindible en la melodia universal, ... compañeros poderosos, que me acompañan en este ultimo abrazo al gesto final.


No hay comentarios:

Publicar un comentario